Por fin había llegado a la gran ciudad de Los Angeles!
Se lo debia agradecer a mi super convertible, de otro modo, hubiese tardado mas.
Ahora, la cuestion era..¿que le podia comprar a Alice?
La verdad, que nose porque no la habia traido conmigo- pense para mi misma.
y para el colmo, Emmett no me ayudaba lo suficiente, ya que me hacia gestitos de seduccion cada vez que lo miraba.